Delitos económicos y contra el patrimonio: apropiación indebida, estafa, falsedades, delitos societarios, blanqueo de capitales, insolvencia punible, falsificaciones, robo, hurto, daños, fraudes, etc.
Delitos contra la libertad: detención ilegal, secuestro, amenazas, coacciones, tortura y delitos contra la integridad moral.
Delitos de circulación de automóvil: alcoholemias, conducción sin carné, desobediencia a la autoridad, omisión del deber de socorro y conducción temeraria.
Delitos contra el honor: calumnia e injuria.
Delitos contra la administración de justicia: prevaricación, acusación y denuncias falsas, simulación de delitos, falso testimonio, obstrucción a la justicia, deslealtad profesional, quebrantamiento de condena.
Delitos en el ámbito de la familia: malos tratos en el ámbito del hogar (violencia doméstica), abandono de familia, impago de pensiones, sustracción de menores, etc.
Delitos contra la salud pública: tráfico de estupefacientes, contaminación medioambiental, ruidos.
Delitos contra las personas: lesiones, homicidio, asesinato, etc.
Delitos contra la intimidad: descubrimiento y revelación de secretos, allanamiento de morada.
Delitos administrativos y políticos: cohecho, prevaricación, delitos urbanísticos, tráfico de influencias, malversación, fraudes, corrupción e infidelidad en custodia documentos, delitos contra los derechos fundamentales y libertades públicas, delitos cometidos por funcionarios.
Delitos contra la libertad sexual: agresión sexual, abuso sexual, acoso sexual, etc.
Delitos contra el orden público: atentados contra la autoridad, resistencia y desobediencia, así como tenencia, tráfico y depósito de armas.
Delitos contra la propiedad intelectual e industrial.